CASTABLE REFRACTARIO

CASTABLE REFRACTARIO

Los CONCRETOS REFRACTARIOS o CASTABLES que produce SHALOM son preparaciones formadas por gránulos de material refractario molido, mezclados con una cantidad de CEMENTO REFRACTARIO ESPECIAL, generalmente de fragua hidráulica. Con la adición de agua se transforma en una mezcla muy trabajable que endurece rápidamente. 

Con los CONCRETOS REFRACTARIOS se pueden hacer instalaciones nuevas o reparaciones a materiales refractarios que fallan o se deterioran en el servicio.

Se emplean:

  • Para reemplazar a los ladrillos refractarios convencionales
  • Para fabricar de emergencia formas especiales complicadas
  • Para reparar zonas del horno afectada por desgaste físico o ataque químico
  • Para hacer construcciones monolíticas sin juntas de unión o impermeables

Instalación

En la instalación hay que tener en cuenta dos factores: el primero es la forma de aplicación y el segundo es el fraguado. Los castables se instalan bien sea con el badilejo, mediante vaciado en un encofrado o molde, o proyectándolo con una pistola neumática sobre la zona que se va a revestir. En las aplicaciones por vaciado es necesario vibrar, sacudir o rebullir el encofrado. Con el badilejo no hay que pulir la superficie.

Proceso de Instalación

Como cualquier concreto refractario estructural, los castables refractarios que fabrica SHALOM se suministran en forma seca y para prepararlos necesitan solamente de ser mezclados con una cantidad de agua limpia y fresca, cantidad que varía generalmente entre el 8 y el 15% en peso. Como regla general se dice que la densidad final del producto está en relación inversa a la cantidad de agua usada. Es indispensable uniformizarlo perfectamente la mezcla húmeda antes de instalarla. La preparación de la mezcla depende también del método que se usar para instalarlo, esto es:
  • Mezclado manual, para instalación con badilejo.
  • Manual o mecánico, generalmente en función del tamaño de la obra, para instalación por vaciado en encofrados.
  • Mecánico (automático) para instalación con pistola.

Aunque la consistencia de la mezcla va según la finalidad de la aplicación, hay una regla sencilla para determinar el punto ideal; esta es, se forma una bola uniformemente mezclada, de unos 10 cms de diámetro, se lanza al aire unos 30 cms y se recibe en la mano entre abierta, si la bola se desintegra al empararla es porque al material le falta agua y si se escurre entre los dedos es porque le sobra agua. 

Para obtener mejores resultados se usan los Castables asegurándolos con anclajes, cerámicos o metálicos, contra la estructura del horno, si el molde o el material donde se instalara el Castable absorbe humedad, es imperativo que sea mojado previamente, para evitar que tome agua del concreto y se malogre el fraguado.

 
Una vez instalado el material no hay que dejarlo fraguar; el fraguado dura 12 horas de “CURADO” más 24 horas de “SECADO”. “Curar” la instalación consiste en cubrir con agua o mantener en ambiente húmedo toda la zona de la aplicación, debido a que los concretos requieren agua para fraguar y desarrollar toda su resistencia; el secado debe hacerse al aire y sin aplicar calor, usando solamente las condiciones atmosféricas normales. Aun después del secado las obras hechas con Castables conservan aun mucha humedad por eso hay que calentarlas lentamente mientras expelen el agua residual. Es muy importante no calentar rápidamente cuando la instalación esta aun húmeda, porque la evaporación violenta del agua produce rajaduras o despostillamientos. Una buena curva de calentamiento seria
  • Mantener durante 18 a 24 horas a 100°C.
  • De 100°C a 340°C calentar con un incremento máximo de 10°C por hora.
  • De 340°C en adelante subir libre, pero cuidadosamente hasta alcanzar la temperatura de trabajo.